INFORMACIÓN,
DES-INFORMACIÓN E INTOXICACIÓN.
M. Alonso
El juicio y condena a 35
años de cárcel al soldado yankee Bradley Manning, acusado de filtrar material
secretos militares a Wikileaks, es noticia principal en los mass media
mundiales.
Todo muy lineal y
supuestamente legal pero ¿desde cuando la prensa burguesa informa de forma
desinteresada u objetiva?
Hay quien me recordara el
caso Watergate como ejemplo del cuarto poder. Nunca se rebeló quien era el
misterioso garganta profunda y sus autenticas motivaciones, por mucho que un
anciano miembro del FBI asumiera su autoría. Richard Nixon siempre fue un tipo
despreciable y paranoico pero no más que su bien querido maestro Edgar Hoover o
su asesorisimo herr Kissinger.
Convencernos que Manning
es un inestable travesti o que Assange es un violador de suecas puede ser una
des-información hecha para dar credibilidad a unos datos secretos, delirantes
chismorreos propios de una novela de Graham Grene, que permiten presentar al
actual Presidente de Ecuador, Lucio Correa, como el protector de la verdad
revelada por Assange.
¿Qué alma bienintencionada
puede dudar que los EE.UU. y las demás potencias imperialistas se espían unos a
los otros o a sus ciudadanos
Y una vez revelado el
secreto; ¿Qué ocurre? Nada.
Hoy es conocida y publica
la implicación del premio Nobel de la Paz* Henry Kissinger en los brutales bombardeos
secretos sobre Kampuchea, el criminal golpe militar de Pinochet en Chile o el
genocida “Plan Cóndor” y... ¿Qué ocurre? Nada, que impida a ese criminal de guerra
comer su langosta.
Como criminal de guerra
nazi fue, el fundador del servicio de espionaje de la República Federal Alemana,
el Bundesnachrichtendienst, el general Reinhard Ghelen. Rescatado por la CIA para
su lucha contra el comunismo, está plenamente documentada sus acciones en
documentos desclasificados por la administración Clinton. La URSS denunciára de
forma reiterada a esa red criminal integrada por nazis, desde el final de la II Gran Guerra Imperialista pero; ¿Qué ocurre? Nada.
Morirá retirado, rodeado de sus seres queridos y medallas nazis, en 1979.
Si el axioma que califica;
la información es poder es cierto. ¿Por
qué pensar que el cuarto “poder” es ajeno a la triada, de la
dictadura burguesa?
Antes la verdad de hechos
o de personajes se ocultaba en cajones o cajas fuertes, hoy, a la vista de todos,
en medio de toda clase de embustes o medias verdades.
Tenemos que filtrar
siempre la información con nuestra ideología, nuestra posición de clase, ver qué
objetivo pretende, la veracidad de la fuente y jamás dar credibilidad inicialmente
a la información, por amiga que parezca.
Las mentiras cuanto más
grandes, por descabelladas que parezcan, son la fuente de los milagros y de la
magia.
Eso lo sabía muy bien
Joseph Goebbels.
* El mas Nobel de todos los premios
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