El genocida Telmo Hurtado, principal acusado por el asesinato de 69 campesinos en el año 1985, rechazó los cargos que se le imputan durante el juicio que se le sigue en Lima por una matanza llevada a cabo durante la primera administración de Álan García (1985-1990) como parte de las acciones para combatir al Partido Comunista del Perú.
El juicio contra Hurtado inició este lunes en el penal Castro Castro, en el distrito limeño de San Juan de Lurigancho (este) y la audiencia se extendió por media hora.
La siguiente audiencia de El carnicero de los Andes, como se le conoce en los medios de comunicación locales, se efectuará el próximo lunes debido a que Hurtado pidió no presenciar los interrogatorios del resto de acusados y testigos.
Luego de que se conocieran estos crímenes, Hurtado huyó a Estados Unidos en la década del 1990, país en el que fue posteriormente detenido por las autoridades norteamericanas ante un pedido del Gobierno peruano. Permaneció preso en el país en territorio estadounidense durante 10 años hasta que fue extraditado en julio de este año a Perú.
El 14 de agosto de 1985, unos 69 campesinos fueron asesinados a sangre fria en la localidad de Accomarca por tres patrullas del Ejército peruano. Los militares reunieron en unas pequeñas casas a los campesinos, a quienes acusaron de ser simpatizantes de la guerrilla comunista. Una vez encerrados en las casas, los militares abrieron fuego y lanzaron explosivos dentro.
Hasta el momento han sido procesados un total de 29 ex efectivos del Ejército, desde el 4 de noviembre del 2010, luego de que se reabriera el caso después de 25 años de haber sido cerrado.
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