¡Que se mueran los feos!
Miguel Alonso.
En estos tiempos de cambio, de cambio de imagen, claro esta, se están produciendo relevos, jubilaciones reales o aclamados fallecimientos que enriquecen el escalafón de puestos a cubrir para toda una tropa de aduladores, advenedizos y arribistas (la triple A).
La Monarquía se renueva, se hace mas transparente (como Leticia). Ahora sabemos de la inmensa fortuna del sucesor de Franco, a titulo de Rey. El mismo que, con sus formas campechanas, nos hace un corte de mangas de aforado impune ... y que Sofi, si quiere, se marche a Grecia, que Cori tendrá siempre un sitio en su cartera y en su corazón.
Corazón, que le jugo una buena al super tacañon, avaro y miserable que regentaba el poder real en uno de los grandes banco-delincuentes. Dicen que viajaba siempre con un desfibrilador..menos cuando dormia. Ir aprendiendo chicas y chicos.
Bueno y en la arena política que decir del sucesor de Rubalcaba. Un bello maniquí triple A casual, que en breve pasara por Corporación Dermo-estetica para eliminar las marcas, de un agné mal curado, en su aún cercana juventud.
Juventud esa obsesión terminal del capitalismo. En ello, quizás, hay que encontrar la razón del rechazo de la Juana de Arco del españolismo mas rancio, Rosa de España, a un acuerdo con el cromo de Cidadans.
Con otro estilo, encontramos al emergente, o detergente, Podemos. Los del buen rollo, en el que caben todos, siempre y cuando sean universitarios, universitarias, hijos del rancio aparato oportunista tanto político como sindical. Ni de izquierdas ni de derechas, puros, castos, inmaculados.
Lacayo ya tiene un joven sucesor y la Malagón, que ya advirtiera contra tanto lujo congresual, dicen que esta pensando en abandonar a PI por PIT.
El fin del régimen, como no podia ser menos, es un esperpento de Valle.
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