Publicamos a continuación una información publicada en el diario La Republica. En la misma, con toda la prudencia sobre la veracidad de la información, se puede apreciar la lucha de lineas en las LTC.
Versión policial. Grabación fue incautada durante requisa del jueves 24 y 25 de junio. Casete contiene un debate realizado hace solo dos semanas sobre el curso que debe seguir la organización terrorista Sendero Luminoso.
Doris Aguirre.
De acuerdo con fuentes de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote), Elena Iparraguirre Revoredo, pareja de Abimael Guzmán Reinoso e integrante del Comité Central de Sendero Luminoso, dirige reuniones partidarias en el penal Santa Mónica de Chorrillos, en las que se definen los lineamientos de la organización subversiva.
La policía especializada comprobó que Iparraguirre y otras dirigentes senderistas, como Laura Zambrano Padilla, Martha Huatay Ruiz y Margie Clavo Peralta, participan en los debates de la agrupación cuando intervino el penal el pasado jueves 24 y 25 de junio, y requisó material sospechoso a las reclusas.
Durante la acción policial se encontró un casete en el que se registró un ardoroso debate entre las senderistas que están a favor del acuerdo de paz y reclaman amnistía para Guzmán, conocidas como “acuerdistas”, y las que apoyan las acciones armadas que emprende en el valle de los ríos Apurímac y Ene (Vrae) el prófugo Víctor Quispe Palomino (a) “camarada José”, llamadas las “liquidacionistas”.
Las segundas cuestionan que Guzmán suscribiera un “acuerdo de paz” con el ex presidente Alberto Fujimori olvidándose de las columnas senderistas que esperaban instrucciones para continuar con la lucha armada. Ellas denuncian a Guzmán por haber abandonado la dirección de SL renunciando a continuar con las hostilidades.
Ídolo derribado
El grupo a favor del “camarada José” reclamó también por la posición de Guzmán y la cúpula de continuar alentando el “acuerdo de paz”, e incluso de intervenir en las próximas elecciones generales.
“Cuando yo me incorporé a la guerra no era para eso, para las elecciones, para capitular (rendirse), no fue para un acuerdo de paz”, criticó una senderista, cuya identidad no se revela porque su caso se encuentra bajo investigación.
“En 1992 cayeron Guzmán y otros y con ellos los croquis, planes, publicaciones, directivas... toda la información –se oye en el audio–. El enemigo conoció así nuestras operaciones, y en ese año tuvimos un feroz enfrentamiento con el Ejército que duró más de 72 horas”.
“Nos atacaron por tres frentes con tres helicópteros”, relató una de las senderistas ante Elena Iparraguirre y el resto de la dirigencia. “Éramos un grupo de entre 70 y 80, y entre ellos estaba el ‘camarada Feliciano’. En ese momento nos llegó una consigna desde la cárcel: ‘En defensa de la jefatura (Abimael Guzmán), combatir y resistir’. Eso fue algo absurdo. (…) No teníamos comida, ni ropa, ni medicamentos”, se pudo escuchar.
“Nos perseguían a sangre y fuego. Dentro del Vizcatán no había víveres, no había medicamentos, no había municiones –se sigue diciendo–. Mis compañeros morían de hambre, también las gestantes, los niños, los bebés. Yo pregunto al señor Guzmán, a la señora Iparraguirre y a los demás (de la dirigencia): ¿Qué perdieron con la guerra? ¡Nada! ¿Qué perdió el señor (Óscar) Ramírez (Durand, ‘camarada Feliciano’)? Tampoco... ¡ Nada! Algunos como el señor Guzmán mandaron a sus familiares al extranjero.
También los familiares de la ‘camarada Norah’ (Augusta La Torre Carrasco, esposa de Guzmán) se fueron a Suecia. ¿Y nosotros?”.
Sigue la guerra
En otro fragmento de la grabación se escucha a una dirigente criticar con dureza la nueva prédica de Guzmán y la cúpula en relación con la amnistía y la participación senderista en el proceso electoral. Este detalle demuestra que el registro es reciente, que los senderistas todavía utilizan las prisiones como las llamadas “luminosas trincheras de combate”.
“No luchamos para las elecciones, no luchamos para que ahora participen en elecciones. Ahora piden la amnistía, no luchamos para eso. No me incorporé (a Sendero Luminoso) para eso. No dejé a mi familia, ni mis estudios para eso. Dejé todo por el comunismo. El acuerdo de paz es una siniestra capitulación, una traición. También debo recalcar que Guzmán colaboró con Alberto Fujimori”, expresó la subversiva en un tono de voz por demás airado.
Aparte de condenar a Abimael Guzmán por su línea, otra senderista selló la reunión con la siguiente frase que, según la Policía Nacional, suena a amenaza: “¡No nos hemos rendido!”.
Iparraguirre dice que operativo en penal fue abuso
A través de un comunicado, la senderista sentenciada Elena Iparraguirre denunció el operativo policial como un abuso contra sus compañeras de celda del pabellón B recluidas en el penal de máxima seguridad Santa Mónica.
Iparraguirre señaló que un contingente policial de 250 efectivos de Dircote y del INPE se ensañó con las internas por terrorismo, especialmente con Maritza Garrido Lecca y Laura Zambrano.
La pareja de Abimael Guzmán, cabecilla de Sendero Luminoso, reiteró que la guerra popular ha terminado y negó cualquier vinculación con los senderistas que operan en el Valle de los ríos Apurímac y Ene (Vrae), dirigidos por Víctor Quispe Palomino, “camarada José”.
En el comunicado, Elena Iparraguirre también rechaza la intolerancia a las ideas que cuestionan lo “establecido”, y que por eso persiguen a los marxistas leninistas maoístas.
Afirmó que la intervención al penal responde a lo dicho por el presidente Alan García, respecto a que evitará liberar a los terroristas.
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