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París, 15.07.19
El día de la toma de la Bastille del 2019, será recordado como ejemplo de la enconada lucha de clases que vive el país.
En medio de medidas excepcionales de seguridad, millares de efectivos de las fuerzas represivas fueron desplegados, para impedir que la celebración gubernamental fuera boicoteada, por miles de chalecos amarillos, que aprovechando el festivo han vuelto a la capital.
Macron fue abucheado a su llegada por un centenar de chalecos amarillos y después de concluir el desfile militar comenzaron los enfrentamientos en des Champs-Elysées, que pronto se llenó de gases lacrimógenos y de barricadas ardiendo, informa AFP.
Hay mas de doscientos detenidos, entre ellos dos figuras conocidas del movimiento, Jérôme Rodrigues y Maxime Nicolle acusados de "convocar una manifestación ilegal", aunque posteriormente han sido liberados, sin cargos.
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