sábado, 28 de noviembre de 2015

¿Es el derribo del avión ruso por Turquía el nuevo Sarajevo? Un articulo del camarada M. Alonso para correo vermello.






¿Es el derribo del avión ruso por Turquía el nuevo Sarajevo?
Miguel Alonso / correovermello. 

El derribo de avión ruso Su-24 por F-16 turcos y el asesinato de uno de sus pilotos, por las bandas terroristas que operan en la frontera con Turquía, es una acción de alcance de imprevisibles consecuencias.
La camarilla belicista de la OTAN, responsable directa del golpe de Estado en Ucrania, fracasó en sus intentos desestabilizadores de la frontera del Este, cuando Rusia respondió con una guerra de baja intensidad, que puso contra las cuerdas al régimen fascista de Kiev, incorporando a Rusia territorios como Crimea o reconociendo a las Republicas Populares del Donetz.
La otra operación de la OTAN es, sin duda, el “nuevo” Medio Oriente y después del asesinato del Coronel Gaddafi y la destrucción del Estado libio, su objetivo principal pasó a ser Siria y su gobierno del partido Baath.
Una compleja coalición de criminales sionistas, islamistas de Turquía, déspotas feudales de Arabia Saudí o Qatar son respaldados por los belicistas de la OTAN, para organizar una fuerza insurgente, en un principio llamada “Oposición Moderada” después Frente Al-Nusra y finalmente Estado Islámico o Daesh, en árabe.
La base principal de los nuevos reclutas, esta en antiguos cuadros del ejército de Irak y en las múltiples contradicciones religiosas que dividen a los pueblos en la zona, cuyas fronteras son el resultado de un reparto territorial del imperio otomano por las potencias imperialistas. A estos se han sumado miles de jóvenes sin futuro, lumpen proletariado de origen árabe de la metrópolis imperialistas, bien engañados por el fanatismo religioso o por las cuantiosas pagas de Arabia Saudí.
Hoy incluso Francia, tiene reconocido que impulsó “las revueltas democráticas” contra el régimen del Presidente Bashar El Assad, probablemente asesorados con los mismos asesinos del dirigente libio.
¿Y se asombran que el terror llame a sus puertas?
Bien, es en este escenario, que tras cuatro años de guerra civil en Siria, Rusia, bajo la dirección del ex miembro del KGB Vladimir Putin, decide actuar, no como simple apoyo de su aliado sirio, sino como fuerza activa desplegando unidades aéreas y de la armada, reforzando su base naval en el puerto sirio de Tartus.
Esta acción rusa, que parece sorprender a la OTAN, desmonta a mi entender, la por entonces inminente, invasión turca, preparada previamente y activada con el ataque, atribuido al Daesh, que costó la vida a 35 jóvenes en Suruç.
El estado fascista turco, bajo la dirección del ególatra “sultán islámico” Erdogan, con un serio problema en el interior, tanto por el auge de las protestas en las grandes ciudades como por el desafío kurdo en el Kurdistan norte, decide continuar con sus planes belicistas, amparados por la OTAN y sus socios de las monarquías feudales, aumentando todo tipo de provocaciones contra Siria y la aviación rusa.
Esa escalada ha tenido su punto culminante en el derribo en territorio sirio, allí cayó el aparato y sus pilotos, de un Su-24 ruso que supuestamente violó el espacio aéreo turco.
Este ataque, sin sentido desde el punto de vista de la defensa militar, es sin duda un envite para una mayor respuesta de la superpotencia rusa, una simple provocación. Rusia ha protestado enérgicamente y lo ha calificado de inaceptable pero ha evitado mostrar sus cartas, si exceptuamos el despliegue, oficial, del sistema anti-misiles S-400 Triumf en Siria. Este armamento de alta tecnología anula el poder ofensivo de las fuerzas de la OTAN en una amplia zona, incluida la mitad sur de Turquía, según informan los analistas sionistas. Como prueba de ello Turquía ha dejado de violar el espacio aéreo de Siria, algo que hacían de forma habitual.
La eficacia de los bombardeos aéreos rusos en la infraestructura de los mercenarios del Daesh y en su logística está afectando de forma importante no solo a sus fuerzas de combate, sino también a los negocios del petróleo ilegal, traficado en la frontera turca.
Rusia ha exigido disculpas, indemnizaciones y castigo para los culpables, cuestiones que Turquía no parece querer satisfacer. ¿Cuál será la respuesta rusa?

¿Sera este derribo del avión SU-24 algo parecido a lo que aconteció en Sarajevo con el Archiduque Carlos en 1914?

No hay comentarios: