Los naxalitas y los grupos islámicos
En estas últimas semanas se ha alzado una
gran polémica en el movimiento comunista internacional por la posición
manifestada del PMLI (Partido Marxista Leninista Italiano) en torno al
ISIS con su artículo “Apoyemos el Estado Islámico en contra de la Santa Alianza Imperialista”. Por el momento la mayoría han sido críticas como la carta abierta realizada por el PCm de Galicia, aunque también se ha expresado algún apoyo como el del PC (M-L) de Panamá a través de una resolución.
El tema de discusión, aunque no demasiado
desarrollado por el PMLI, se centra en la cuestión de si en el
interior del ISIS existen o no algunas fracciones antiimperialistas que
puedan ser susceptibles de ser aliadas de un partido comunista y de las
masas. No se cuestiona en ningún momento el carácter criminal de gran
parte del ISIS. Como se puede observar se trata de un tema de elevada
complejidad y requiere un análisis cuidadoso. No se puede despachar en
un momento con alguna gran frase o a través de insultos y
descalificaciones ya sea por un bando o el otro.
Pareciera que la cuestión o posición
planteada por el PMLI es una invención o innovación suya por no decir
hacer el juego al imperialismo como algunos han señalado. Sin embargo no
es así, no se trata de una cuestión totalmente nueva en el movimiento
comunista internacional. Los naxalitas, desde hace años, defienden la
alianza con grupos islámicos “antiimperialistas” y mantienen relaciones
con algunos grupos islámicos de la India como el Movimiento Islámico de Estudiantes de la India (SIMI), organización prohibida por el gobierno hindú por una supuesta relación con Al-Qaeda.
A continuación podéis ver una serie de
citas del camarada Ganapathi, líder de los naxalitas, que sintetizan la
opinión del PCI (M) en este asunto:
“Básicamente, consideramos al auge
islámico como una progresista fuerza anti-imperialista en el mundo
contemporáneo. Sería un error describir la lucha que está sucediendo en
Irak, Afganistán, Palestina, Cachemira, Chechenia, y varios otros países
como una lucha de los fundamentalistas islámicos o como una
resurrección de algo teorizado ya hace mucho tiempo por Samuel
Huntington con el nombre “choque de civilizaciones”. En esencia, a
pesar del rol desempeñado por los fundamentalistas islámicos en estas
luchas, todas ellas son guerras de liberación nacional.
Ideológica y políticamente, nosotros
nos oponemos al fundamentalismo religioso de cualquier tipo, ya que
oscurece las distinciones de clase y la lucha de clases y mantiene a las
masas bajo el yugo de la opresión de clase. Sin embargo, el
“fundamentalismo islámico”, en mi opinión, es un aliado del pueblo en su
lucha contra el fundamentalismo del libre mercado promovido por los EE.UU.,
la UE y otros imperialistas. El resurgimiento islámico está obligado a
elevar la conciencia democrática antiimperialista entre las masas
musulmanas y acercarlas más estrechamente con fuerzas progresistas y
revolucionarias. A pesar de la dominación de la ideología
fundamentalista y las perspectivas del movimiento islámico en la
actualidad, veo el resurgimiento islámico como el inicio del despertar
democrático de las masas musulmanes“. (Abril 2007)
“Nuestro partido apoya el
resurgimiento islámico y busca la unidad con todas las fuerzas
antiimperialistas… La izquierda no puede siquiera autodenominarse a si
misma democrática si no inicia los pasos para unirse con las fuerzas del
movimiento islámico… El fuerte lenguaje religioso utilizado por los
líderes de éstos movimientos no altera su esencia democrática nacional y
su carácter anti-imperialista“.
“Los Movimientos islámicos yihadistas
tienen dos aspectos: uno es su aspecto antiimperialista, y el otro su
aspecto reaccionario en asuntos sociales y culturales. Nuestro partido
apoya la lucha de los países musulmanes y los pueblos contra el
imperialismo, al mismo tiempo que critica y lucha contra la ideología
reaccionaria y la visión social del fundamentalismo musulmán… Siempre
nos esforzamos por reducir la influencia de la ideología reaccionaria y
perspectiva oscurantista de los mullahs y maulvis sobre las masas
musulmanas, mientras que planteamos la unión con todos los que luchan
contra el enemigo común de la población del mundo, esto es, el
imperialismo, sobre todo el imperialismo de EEUU” (Junio 2011)
“De hecho, el fundamentalismo
religioso musulmán se siente alentado y fomentado por los imperialistas,
siempre que ello responda a sus intereses- como por ejemplo en Arabia
Saudita y otros países del Golfo, y Kuwait, Afganistán, Irak, Pakistán ” (Junio 2011)
Estas declaraciones de los naxalitas
tuvieron en reacción unas fuertes críticas por parte de la organización
maoísta afgana A.L.O. que las publicó públicamente en un documento
titulado el Partido Comunista de la India (Maoísta) y los Fundamentalistas islámicos.
Sus críticas se sustentaron en base al análisis de clases de los
talibanes y otros grupos islámicos, la relación que tenían estos con los
imperialistas y la experiencia de las últimas décadas en Irán, Irak,
Afganistán…
No sólo hay críticas en el documento de
los camaradas afganos también hay algunas observaciones y reflexiones
interesantes, que abren la posibilidad a una alianza con los islamistas
en ciertas circunstancias:
“Nuestra intención de ninguna manera
es menospreciar el Islam y la religión en general. Ha habido momentos en
la historia de los países como Irán y Afganistán en la que el clero ha
desempeñado un papel valioso. El debate está en la charla de nuestros
compañeros sobre una alianza incondicional con capos de la droga
procreados por los imperialistas que consideran a los comunistas como
mahdoor-ud-dam.”
“Es posible que en ciertas
situaciones los revolucionarios se conviertan en capitulacionistas o los
reaccionarios se pasen al lado de la lucha del pueblo, pero esto no es
un fenómeno general. No hay que dejarse engañar por ello, pero hay que
tratarlo de forma diligente y de manera precisa.”
“Es posible que las mentes de las
personas puedan cambiar y los elementos de los partidos fundamentalistas
puedan unirse a un partido revolucionario, pero es ridículo imaginar un
cambio de mentalidad por parte de un gobierno fundamentalista o una
escuela de pensamiento. Si los comunistas no pueden concebir a los
imperialistas sino en términos de lucha contra ellos, ¿cómo pueden
esperar una transformación ideológica por parte de organizaciones
fundamentalistas?”
“Marxistas incluso se oponen a la
regla de que “el enemigo de mi enemigo es mi amigo “, ya que no tienen
una visión banal de los problemas; puntos de vista marxistas sobre
cuestiones y fenómenos se basan en el análisis concreto de situaciones
concretas y análisis de clase, y se destacan por ser firmes en los
intereses a largo plazo del proletariado.”
Al final de su documento los camaradas de
la organización A.L.O terminan expresando su camaradería con los
naxalitas y muestran una disposición abierta para aprender de las
críticas y argumentos que éstos les puedan hacer:
“Como el resto de los revolucionarios
de todo el mundo, estamos orgullosos de ustedes; su fracaso es nuestro
fracaso, y su victoria es nuestra victoria y alegría. Su postura
vis-a-vis con el fundamentalismo o cualquier otra fuerza reaccionaria es
de importancia regional y mundial. Es por esta razón por la que sus
puntos de vista sobre Irán, los talibanes y otros deben ser estudiados
con cuidado, y posiblemente criticado. No tenemos ninguna duda de que
vamos a aprender más de su respuesta y explicación.”
Otras fuentes a tener en cuenta para
profundizar en el análisis sobre la conveniencia o no de una alianza con
los islamistas la tenemos en los clásicos:
“Si no queremos traicionar al
socialismo debemos apoyar cada revuelta contra nuestro principal
enemigo, la burguesía de los grandes estados, siempre que no sea una
revuelta de una clase reaccionaria ” Lenin
“El carácter revolucionario del
movimiento nacional, en las condiciones de opresión imperialista, no
presupone forzosamente, ni mucho menos, la existencia de elementos
proletarios en el movimiento, la existencia de un programa
revolucionario o republicano del movimiento, la existencia en este de
una base democrática. La lucha del emir de Afganistán por la
independencia de su país es una lucha objetivamente revolucionaria, a
pesar de las ideas monárquicas del emir y de sus partidarios, porque esa
debilita al imperialismo, lo descompone, lo socava… La lucha de los
comerciantes y de los intelectuales burgueses egipcios por la
independencia de Egipto… es, por mismas causas, una lucha objetivamente
revolucionaria, a pesar de que estén en contra del socialismo…Y no hablo
ya de otras colonias y países dependientes más grande, como la India y
China, cada uno de cuyos pasos por la senda de la liberación, aun cuando
no se ajuste a los requisitos de la democracia formal, es un terrible
mazazo asestado al imperialismo, es decir, un paso indudablemente
revolucionario”.
J. V. Stalin, Fundamentos del Leninismo.
J. V. Stalin, Fundamentos del Leninismo.
Para concluir quiero indicar que lo
escrito en este artículo tiene como finalidad el hacer ver la
complejidad del tema, sus múltiples detalles y matices y de la necesidad
de un debate que permita llegar a una unidad con la crítica y
autocrítica.
Otros artículos de interés en relación a la cuestión de la alianza con los grupos islámicos:
El papel de los talibanes según los maoístas afganos (1ª parte) (Opinión Sholajawid)
El papel de los talibanes según los maoístas afganos (2ª parte) (Opinión A.L.O)
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